1. Inspección regular

Inspecciona cada detalle de la llanta al menos una vez al mes para observar si llegan a tener algún desgaste severo y si se necesita cambiar. Una presión inadecuada, la mala alineación, mal balanceo, y fallas en los amortiguadores, son los causantes de problemas recurrentes en las llantas.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

2. Peso adecuado del vehículo

¡Nunca debes de tener exceso de peso! Si se está arrastrando un remolque, una parte del peso se llega a transferir al auto, lo cual reduce gran parte del peso.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

3. Balanceo correcto

Una llanta y un rin mal balanceados pueden crear movimientos que ocasionan el desgaste el eje de la llanta. Por ello ambos se balancean por la diferencia de pesos, ya que un equilibrio logrado a través de emplear pesas a la llanta y en la parte externa e interna del Rin, equilibrarán la superficie de la llanta.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

4. Alineación

Una mala alineación puede provocar:

- Que se jale el vehículo hacia un lado.

- Desgaste irregular de las llantas.

- Volante mal centrado.

- Consumo excesivo de combustible.

- Pérdida de estabilidad.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

5. Cambio de llantas

Cuando el volante llega a sentirse algo raro (como si tuviera vibraciones), y las llantas rebotan de manera extraña contra el pavimento,

es momento de balancearlas y cambiarlas.

 

Cada llanta llega a soportar  un peso distinto, por esta razón el desgaste no es igual. La recomendación es rotar tus llantas cada 15 ó 20 kilómetros y,

si tu auto es de tracción delantera o vives en la ciudad, debes realizar el cambio de las 4 llantas de forma más frecuente.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

6. Presión de aire

Frecuentemente se piensa que son las llantas las que soportan todo el peso del auto, pero en realidad es la presión del aire que tiene dentro la que lleva todo el peso. Por lo cual, uno de los factores más importantes en el cuidado de una llanta es la presión de inflado. Con la presión perfecta, tus llantas tendrán más tiempo de vida, ahorrarán gasolina, y te ayudarán a prevenir accidentes aportando dirección, tracción y durabilidad.